Apenas meses después de que los crecientes rendimientos de los bonos asustaron a los mercados, ahora están cayendo a los niveles más bajos en los últimos años, para acentuar las preocupaciones sobre la desaceleración del crecimiento económico mundial.

Los rendimientos en Australia y Nueva Zelanda cayeron a mínimos históricos, luego de que una parte de la curva de los Estados Unidos observada de cerca, se invirtió este pasado viernes, 22 de marzo, cuando los inversores apuestan al avecinamiento de una recesión. Los volúmenes de cotizaciones en el futuro del Tesoro fueron más del doble de lo normal en la mañana de la sesión comercial asiática, mientras que los rendimientos de Japón, de los bonos de 10 años cayeron a su nivel más bajo desde el año 2016.

Los mercados de los bonos a nivel mundial, junto con los Bancos Centrales, nos ha estado dando a conocer que la desaceleración está en camino.

Algunas partes del mundo estarán mejor preparadas que otras para recibir este “golpe”, por ejemplo, los Estados Unidos pueden al menos reducir las tasas y aplicar herramientas monetarias, mientras que las cosas podrían ser peores para Europa y Japón, donde no pueden hacer lo que lo Estados Unidos se encuentra en posibilidades.

Los bonos del Tesoro han liderado un repunte de la deuda mundial en medio de las apuestas de que se avecina una recesión y un ciclo de reducción de las tasas. La diferencia entre los rendimientos de los bonos a tres meses en Estados Unidos y los bonos a 10 años se invirtió por primera vez desde 2007 en medio de informes que muestran una debilidad económica en los Estados Unidos, Francia y en Alemania.

Los mercados monetarios tienen una probabilidad de alrededor del 90 por ciento de que la Reserva Federal recorte las tasas en 25 puntos básicos para el próximo mes de diciembre, seguida de otra reducción en el mes de septiembre del próximo año, 2020. Esto ocurre después de que el Banco Central no haya pronosticado aumentos este año en su reunión, la semana pasada, sobre la política monetaria.

El interés abierto, una medida de las posiciones pendientes en los futuros de los bonos del Tesoro, saltó el viernes cuando los rendimientos de los bonos en efectivo a 10 años cayeron 10 puntos básicos a 2,44 por ciento. Los fondos de cobertura y otros especuladores también han recortado los cortos en los futuros a 10 años después de mantener posiciones récord en septiembre.

Las estadísticas se están deteriorando a nivel mundial. Es muy poco probable que la Fed vuelva a subir las tasas, por algún tiempo.

Los rendimientos de los bonos a 10 años de Australia cayeron hasta ocho puntos básicos, hasta 1.756 por ciento. En Nueva Zelanda cayó a 1.899 por ciento. En Japón, el índice de referencia cayó en 1.5 puntos básicos a menos 0.095 por ciento. Los rendimientos de la deuda alemana cayeron por debajo de cero por primera vez desde 2016, el viernes pasado.

Los bonos australianos se han recuperado desde que el Gobernador del Banco Central, Philip Lowe, adoptara una postura neutral el mes pasado.

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